jueves, 30 de enero de 2014

TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO


Obsesiones. Son pensamientos perturbadores e irracionales -- ideas o impulsos no deseados que se generan repetidamente en la mente de la persona. Una y otra vez aparecen pensamientos molestos, por ejemplo "Mis manos están contaminadas; me las tengo que lavar"; "Creo que dejé la estufa encendida"; "Voy a lastimar a mi hijo." En cierto nivel, la persona sabe que estos pensamientos obsesivos son irracionales, pero en otro nivel teme que los pensamientos sean verdaderos y tratar de evitar esas ideas crea muchísima ansiedad.

Compulsiones. Son rituales repetitivos como lavarse las manos, contar, revisar, acumular o arreglar cosas. La persona repite estas acciones, quizá porque siente un alivio pasajero, pero no se siente satisfecha ni tiene la convicción de que ha concluido la acción. Las personas que sufren del trastorno obsesivo-compulsivo sienten que deben realizar estos rituales o algo malo va a pasar.

En algún momento dado, la mayoría de las personas tienen pensamientos o comportamientos obsesivos. El trastorno obsesivo-compulsivo ocurre cuando alguien siente obsesiones y compulsiones durante más de una hora todos los días, de una manera que interfiere con su vida.

Este trastorno puede sufrirlo todo tipo de personas sin importar su grupo social o étnico, o si es hombre o mujer. Por lo general, los síntomas comienzan durante la adolescencia o en los primeros años de la edad adulta.

Se ha acumulado gran cantidad de evidencia científica que sugiere que el trastorno obsesivo-compulsivo es el resultado de un desequilibrio químico en el cerebro. Durante muchos años, los profesionales del campo de la salud mental supusieron erróneamente que el trastorno obsesivo-compulsivo era el resultado de una "mala crianza" o de defectos de la personalidad, pero en los últimos 20 años se ha comprobado que esto no es cierto. Los síntomas del trastorno obsesivo-compulsivo no se alivian con psicoanálisis ni otras formas de "terapia de conversación," pero sí existe evidencia de que la terapia del comportamiento puede ser eficaz, ya sea por sí sola, o combinada con medicamentos. Las personas obsesivo-compulsivas con frecuencia dicen "por qué" tienen esas ideas obsesivas o por qué se comportan compulsivamente, sin embargo, las ideas y los comportamientos persisten.

Los investigadores clínicos han vinculado ciertas regiones del cerebro con esta enfermedad. Han descubierto una fuerte relación entre la sustancia química cerebral llamada serotonina y la obseso-compulsión. La serotonina es un neurotransmisor que ayuda a que las neuronas se comuniquen entre sí.

Asimismo, en personas que sufren de este trastorno, los científicos han observado un aumento en el metabolismo de los ganglios basales y el lóbulo frontal del cerebro. Los científicos creen que esto causa movimientos repetitivos, pensamiento rígido y falta de espontaneidad. Las personas que sufren el trastorno obsesivo-compulsivo con frecuencia también tienen altos niveles de la hormona vasopresina. Para decirlo de manera más sencilla, hay algo en el cerebro que se ha quedado "estancado", como si fuera disco rayado.

Rocío Gay

jueves, 23 de enero de 2014

PROBLEMAS DE SUEÑO

El descanso es esencial para nuestro organismo tanto o más, que hacer deporte o una alimentación saludable. Un descanso adecuado nos va permitir cumplir con los requerimientos de la vida diaria, además nos va a permitir controlar el estrés y tener un mejor estado de ánimo.

Un sueño adecuado implica dormir entre 7 y 8 horas y alcanzar un sueño profundo en ese periodo. Entre los efectos de un descanso adecuado están: estar más descansado, tener un mejor estado físico, aprovechamos mejor nuestras capacidades cognitivas o tener una vida más activa y un mejor humor.De manera, que si no descansamos bien podemos experimentar: falta de energías. irritabilidad, dificultad de concentración, cansancio o incluso problemas gástricos.

Para evitar estos problemas conviene tener una buena higiene del sueño la cual implica crear mejores hábitos del sueño. Entre las medidas que podemos tomar para evitar problemas de insomnio y descansar mejor están: 
  • Mantener un horario fijo para levantarse y acostarse
  • Permanecer en la cama el tiempo necesario para dormir, estar demasiado tiempo en la cama puede provocar un sueño más ligero.
  •  Evitar la siesta. En casos concretos, esta no debería ser mayor de 30 minutos.
  • Evitar la cafeína, la teína, el alcohol y el tabaco.
  • Hacer ejercicio regularmente
  • Controlar la temperatura, el ruido y la luz del dormitorio
  • El hambre y las comidas abundantes pueden alterar el sueño
  • Utilizar la cama solo para dormir
  • Evitar ejercicios intensos dos horas antes de irse a dormir.
Pedro Cortés

jueves, 16 de enero de 2014

SUICIDIO EN ADOLESCENTES

El suicidio es un fenómeno complejo y multidimensional que encuentra sus raíces en factores familiares, educativos, sociales, clínicos y psicológicos. Aunque las tasas de suicidios en España no son muy elevadas si las comparamos con las de otros países, el daño personal y social que provocan en términos de dolor a sus familiares y allegados y en años de vida perdidos justifican la mayor atención a este problema.
El suicidio es ya en muchos países del mundo las segunda causa de muerte entre los jóvenes y adolescentes; en España es la tercera, tras los accidentes de tráfico y el cáncer. Diariamente un joven se quita la vida en nuestro país.
Las razones individuales del suicidio son muy diferentes y si bien no hay una causa psicopatológica muy dominante en los antecedentes psicológicos de los adolescentes y jóvenes con tentativas suicidas, si es posible encontrar una serie de diagnósticos más frecuentes. Entre ellos deben señalarse los episodios depresivos (18,5%), los trastornos de adaptación (18,5%), y los trastornos de personalidad (7,4%). Otros investigadores, señalan como diagnósticos más frecuentes en adolescentes con tentativa de suicidio los trastornos de ansiedad, trastornos afectivos, trastornos de conducta y los trastornos de adaptación, siendo más infrecuentes los antecedentes de trastorno psicótico.

Se debe considerar las tentativas de suicidio como un problema de salud pública dado su elevado riesgo de repetición: casi un 40% de los jóvenes habían comunicado sus intenciones suicidas a alguna persona de su entorno. Las discusiones con sus padres son los factores desencadenantes más frecuentes (38,8%). Por ello, es preciso detectar y tratar los trastornos afectivos y psiquiátricos en los jóvenes, ya que les confiere un especial riesgo. Asimismo, es necesaria la máxima atención a los episodios depresivos y los trastornos de adaptación.
El tratamiento psicoterapéutico, individual o familiar, es imprescindible en los casos ya manifestados o detectados; pero el problema excede al sanitario si tenemos en cuenta que una parte importante de los suicidios ocurren sin ningún aviso o señal específica previa. Por ello, junto a la prevención clínica es necesaria la prevención social orientada a la reducción de los factores de riesgo y el refuerzo de los factores de protección de adolescentes y jóvenes.
La familia, la escuela y el trabajo son los tres medios en los que se mueven los jóvenes y adolescentes; y de ellos surgen la práctica totalidad de los intentos y logros suicidas. La desestructuración familiar, la inadaptación escolar y la marginalidad laboral y social son fuentes privilegiadas de riesgo de suicidio. La ignoracia y la indiferencia frente al problema son también factores que incrementan dicho riesgo.

ROCIO GAY PEREZ

jueves, 9 de enero de 2014

EL SINDROME POSTVACACIONAL

En estos días no hacemos más que escuchar hablar del llamado "Síndrome postvacacional" para referirnos a esa tristeza, apatía que se derivan de la dificultad para adaptarnos después de volver de vacaciones. En realidad, y es lo primero que conviene aclarar, este llamado "síndrome" no se encuentra reconocido como tal. Tanta es la controversia con respecto a este tema que no existe una definición unánime para referirse a este malestar. En este sentido nosotros la definiremos como: " Las consecuencias físicas, mentales, sociales y emocionales que se derivan de las dificultades de adaptación de nuevo a la vida activa". 
Las principales consecuencias del "Síndrome postvacional" son: 
  • Debilidad generalizada 
  • Apatía y ausencia de iniciativa
  • Insomnio y somnolencia a lo largo del día
  • Limitada capacidad de concentración 
  • Angustia vital
  • Habitualmente puede aparecer un cuadro depresivo
  • Las relaciones sociales pueden verse afectadas
  • Mayor agresividad
  • Inseguridad y frustración
 
La intensidad en la que pueden presentarse estos síntomas suele ser variable aunque existen algunas situaciones que pueden predisponernos a padecerlo y/o a agravar los síntomas como son la falta de motivación por el trabajo o unas vaciones excesivamente largas y en las que no se descansa los suficiente. 
Para evitar este malestar lo recomendado es intentar prevenir su aparición. Con este fin os hacemos algunas sugerencias: 
  • Mantener cierto horario: Esto permitirá que sigamos con cierto biorritmo haciendo que sea más fácil la vuelta a la rutina. 
  • Adaptación progresiva: Cuando se acerqué el final de las vacaciones intentar volver a la rutina de forma progresiva puede ayudarnos mucho.
  • Evitar una excesiva motivación en las vacaciones: Esto implica no vivir siempre pensando en las vacaciones. 
  • Mantener nuestras aficiones todo el año, incluso en verano.
  • Intentar elaborar un plan de acción para enfrentarse a la vuelta la trabajo y a las dificultades que puedan aparecer en él. 
 Pedro Cortés

jueves, 2 de enero de 2014

PSICOTERAPIA EL MEJOR TRATAMIENTO PARA LA ANSIEDAD

Los Psícologos desde siempre hemos sabido que el mejor método para tratar la Ansiedad es la Psicoterapia y no los fármacos, como se lleva haciendo en la Salud Pública desde siempre hasta el momento. 

Sin embargo sorprendentemente, en los últimos estudios y publicaciones, nos estamos viendo apoyados por los especialistas Psiquiatras. Concretamente, el vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (Asepp) comenta, en un artículo llamado: "La prescripción de ansiolíticos para tratar la ansiedad es un error frecuente, que emplear ansiolíticos en el tratamiento de la ansiedad es un error que comenten con una cierta frecuencia los médicoas de Atención Primaria; y que estos medicamentos no deben administrarse de forma continuada, ya que su indicación es para las crisis de angustia.

La experiencia desde el ámbito privado de Psicología en España, nos muestra que más de la mitad xde pacientes presentan algún problema relacionado con la ansiedad, ya sea como parte de su propia demanda o de forma "colateral". También sorprende que el 90% de estos pacientes acudan a consulta con un tratamiento farmacológico prescrito por su médico de cabecera, consistiendo en ansiolíticos (Diazepam, Lorazepam, Alprazolam...) y antidepresivos (Paroxetina, Fluoxetina, Citalopram...). Y el 10% restante, no consumen fármacos, coincidiendo con no haber acudido anteriormente a su médico de cabecera.

Para profundizar más en este tema, comentar lo publicado por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) en Febrero de 2012, en un informe llamado "Menos Fármacos y más Psicoterapia", en el que relatan frases tales como la siguiente: "Tras realizar un amplio estudio sobre salud mental, la OCU pide que la psicoterapia sea el tratamiento prioritario para los pacientes diagnosticados con ansiedad y depresión menor, reservando la medicación solo para los casos en que ha demostrado su utilidad".

Por su parte, el Consejo General de Psicología de España, también publicó en Febrero de 2012, un artículo llamado: "La tendencia a recetar fármacos para la ansiedad y la depresión cuestiona gravemente la calidad asistencial que se presta en nuestro Sistema Sanitario", donde afirmaba: "La tendencia a recetar fármacos de manera abusiva cuestiona gravemente la calidad asistencial que se ofrece a los ciudadanos, así como los intereses de la industria famacéutica en perpetuar estos modelos de actuación en salud mental".

Por tanto, concluir con que la ansiedad no se cura con fármacos es una evidencia científica sin lugar a dudas, por lo que animo a tod@s los profesionales de la salud a seguir diciéndolo sin miedo, hasta que alguien se digne a tomar medidas, ya que en cuestión de Salud nos afecta a tod@s!!!
Olga García Bermúdez (Psicóloga Sanitaria AO07690)